El tiempo pasa sin darnos cuenta, y haciendo memoria me he dado con la sorpresa de que han transcurrido cuatro años desde la fecha que vi esta nueva Luz orientadora del Hombre del Siglo XX, que por gracia y benevolencia del Padre, Eón de Inteligencia Eterna, quiso que naciera en la Amazonía Peruana, en la ciudad de Iquitos, un 21 de Setiembre del año 1968, año de Los Derechos Humanos. Brahamanismo Lamaísta fue el nombre con que nació, y posteriormente en el CONABLA de Cochabamba, Bolivia, se cambió de nombre, y quedando desde aquel entonces como “SEPTRIONISMO DE LA AMAZONÍA”. Las razones del cambio de denominación son del conocimiento de todos los militantes y es por esa razón que no se agrega al presente testimonio.
¿CÓMO LLEGUÉ AL SEPTRIONISMO?
Todo hombre en alguna etapa de su vida busca con ansiedad saber ¿por qué estoy aquí? ¿Qué es lo que estoy haciendo por los demás? ¿Por qué razón hay en la humanidad tanta confusión, tanta indolencia por los problemas de los menos favorecidos por la vida? ¿A qué razón se debe que unos triunfen y otros no? ¿Por qué razón uno piensa hacer lo bueno, y luego hace lo contrario, lo malo? ¿Qué nos impulsa a obrar de esta manera? y tantas otras interrogantes que en algún momento se hace cada persona.
Fue en esta etapa de mi vida que decidí matricularme en una escuela de esoterismo para de esta manera poder tener un guía orientador de todas mis inquietudes. No está demás agregar que antes de tomar esta determinación me hice el firme propósito de cambiar, y me dije: “Leoncio, hasta hoy has venido haciendo todo lo que querías sin importarte que con tus actos haces tanto daño”, y dije “a partir de hoy debes cambiar”, y me hice el firme propósito de cambiar.
En estas circunstancias de medida apareció un Septriónico, y sus palabras iniciales fueron las siguientes: “Cuando a nosotros nos llaman siempre nos hacemos presentes”. Yo le dije, “vea hermano, estoy por comprar el giro en dólares para matricularme en esta escuela de México”. “Estamos muy bien”, me contestó, “pero antes quisiera que des una leidita a la literatura que te he traído, y para que veas que somos diferentes, todo lo que te estoy entregando vale en soles 300, nosotros no regalamos nada porque creemos que una cosa tan útil como la que te entrego debe ser pagada,, para que aquel que recibe lo valore y no lo use de almohada”. Esta última parte, lo “de almohada”, me llamó la atención, le pagué y me quedé con la literatura.
Los textos eran: Meditación Crucial, Nuestra Misión en el Mundo, El Origen de los Runas, Elucidario, Man Ko Kali. Textos que leí y releí, y me decía “no puede ser, no puede ser que el autor de todo esto es un loretano”. Por la profundidad del contenido me era difícil creer que un coterráneo fuese autor de algo tan inmensamente esclarecedor, y que además respondía a mis interrogantes e inquietudes. Y si existía un movimiento Místico Filosófico ¿cómo es que no me había enterado?
Entonces se despertó en mí la inquietud por saber más y rápido sobre este movimiento. Esperé con mucha paciencia el retorno del hermano que me vendió los textos, y al fin al tercer día regresó con otros textos: Interrogantes al Brahamanismo No. 2. También lo compré sin más dilaciones. Luego preguntó por el contenido de los escritos y conversamos muy ampliamente sobre la Doctrina Septriónica.
Me enteré que el Director Fundador vivía en Lima, y que estaba haciendo la Comunidad Lorenia. Después de todo esto pensé y pensé bastante,y luego llegué al convencimiento que si existía un movimiento de esta naturaleza, había que apoyarlo. Al poco tiempo tuve el honor de conocer personalmente al fundador y creador del SEPTRIONISMO.
Como todos los que llegan, también yo llegué con bastante inquietud, ¿será posible que responda todas mis preguntas? Llevé a mi primera reunión 40 preguntas, las que me respondió en menos de 15 minutos, ampliándolas y explicándolas con su verdadero significado. No quedé muy convencido. A mi segunda entrevista llevé 28 preguntas – también fueron absueltas con la mayor facilidad.
En esas circunstancias un hermano hizo una pregunta, a mi entender fuera de lugar. La pregunta era: “Si el Condor pasa o pasó y si sigue pasando”. Fué a raíz de esta pregunta que mostró su dimensión de Maestro. Fue al contestar esta pregunta que a mi entender parecía un chiste, cuando ví al verdadero Maestro, y me dije interiormente, “Leoncio, éste es el Maestro que tanto buscabas, no tendrás otra oportunidad quédate en el Septrionismo”. Y haciendo caso a mi Yo interno, me quedé en el Septrionismo y aquí estoy, tratando, como muchos de los militantes, de aprender y comprender nuestra Doctrina.
POR QUÉ SOLICITÉ MI INGRESO A LA ORDEN MÍSTICA.
Habiendo transcurrido un tiempo prolongado como simpatizante, consideré que tenía que solicitar mi aceptación en la S.O.M.S., pues consideraba que si quería ayudar en algo, lo que tenía que hacer era prepararme para lograr este fin. Con la buena suerte, mi solicitud fue aceptada, y una memorable fecha 7 de Junio, cumpleaños del Director Fundador, fuí aceptado como militante de la S.O.M.S., “Pariente Aceptado”.
Empecé a estudiar y estudiar, y en algún momento me dijo el Director Fundador: “cuando vayas a Lima vas a poder conocer algo más sobre la Doctrina”.
LLegó ese día. Viajé a Lima por problemas de mi hijo. Tenía la determinación de estar solamente tres días, pero ya antes me dijo el Director Fundador “cuando vayas a Lima te quedarás ocho días estudiando y conociendo la Doctrina”. Como decía anteriormente, viajé únicamente por tres días. Para sorpresa mía, tuve que quedarme ocho días, tal como me lo dijo el Director de nuestra Institución.
Hicimos varios trabajos con la Honorable. Hermana Teresa Lazo.
Nuestra tarea empezaba muy temprano y terminaba muchas veces a la una o dos de la mañana. Fue en esas circunstancias que la Hna. Teresa dijo que si seguía en este plan me daría “Septriocefalia”. Y luego de cinco días de trabajo, cuando ya veía terminar la labor de una mañana, vino el Director con unos legajos archivos de la Institución y me dijo: “Cuando termines de leer todo esto, retornarás a Pucallpa, no trates de entender, únicamente, lee”.
Así lo hice, terminé fatigado pero contento, pues, ya conocía qué era nuestra Doctrina. (Me refiero a lo que ha dado hasta hoy.)
Regresé a Pucallpa con una carpeta llena de literatura de nuestra Institución, que por benevolencia del Director Fundador me fue entregada. Fue este viaje el primero, y que hice como aceptado. Visité también a Lorenia. Compartí inquietudes con los Hermanos de Lorenia. Ví cómo se estaba empezando a consolidar nuestra Institución. Como no tenía mucha confianza, miraba y ponía mucha atención en todas las conversaciones y charlas. ¡Cuánto aprendí en este viaje!
Tomé la firme determinación de trabajar por la Institución. Me parece que este deseo se está cumpliendo, pues hoy podemos ver con satisfacción que se va logrando, tanto en Pucallpa como en Lima, el avance de nuestra Institución, y particularmente para mí es motivo de satisfacción y orgullo ver lo que estamos logrando. ¡Gracias al Padre por concedernos la gracia y su benevolencia de poder materializar nuestros deseos!
PROGRESO PERSONAL
Las enseñanzas Doctrinales dicen bien claro que es cuando das con buena voluntad y con desprendimiento, cuando recibirás las justas compensaciones. Yo afirmo que esto es cierto, tengo tantas evidencias de Asistencia, que sería corto el tiempo para narrarlas. Por decir un ejemplo, mi negocio, “La Casa Luminosa”, se encontraba en muy mala situación económica. Reacio a pedir ayuda, por vanidad o quizás por orgullo, cada día se ponía más álgida la situación de nuestra empresa. Un día decidí en cumplimiento de las enseñanzas Doctrinales, en la parte que dice: “Ni Dios puede hacer algo por quien no lo solicita”, pensé bastante y decidí solicitar ayuda a nuestro Director Fundador. Bastó ese hecho y con mucha claridad empezó a cambiar el rumbo del negocio. Hoy por hoy puedo decir que mi empresa es una de las pocas empresas que no tienen letras prestadas a pesar de lo difícil de la situación económica actual. Y cada día que pasa se hacen las manifestaciones de ayuda más y más evidentes. También se evidencia la enseñanza “descubrdi el mal y encontraréis el remedio”.
Tengo que manifestar hoy que mi identificación con la Doctrina, con la ayuda de mi Guía, cada vez se acrecienta. Tengo también que hacer hoy mi gratitud pública por tanta ayuda al V:. H:: . Claudio.Le dije alguna vez “la deuda que tengo por tantas ayudas nunca las podré pagar”. También mi gratitud a nuestra Madre Espiritual, por sus ayudas, orientaciones y consejos. No creo poder pagar tantas y tantos beneficios que recibo constantemente. También quiero expresar mi agradecimiento a nuestro Hno. Severo Saavedra, por haberme franqueado las puertas del Septrionismo, a la Honorable Hermana. Isabel Bedoya, por sus constantes ayudas que me brinda, a nuestra Honorable Hermana Teresa Lazo,, por todos los consejos y enseñanzas.
También quiero dejar constancia de mi agradecimiento al Hermano Uldemar, por escuchar los consejos y la decisión que tomó de trabajar para la Institución. Y también a todos vosotros, Honorables Hermanos, por sus solicitudes de ayuda para este vuestro Hermano Confuciano.
Gracias….. Muchas gracias.
Testimonio Leoncio Chu Cueva
Pucallpa, Setiembre de 1983
(En La Paz de Eón desde 2018)
Fue el Consejero Ejecutivo de la Orden Mística y el Consejero Supervisor del Radiomnis de Ucayali)