-Siempre fuiste un ejemplo y diste lo mejor de ti, aunque no estés físicamente aquí sabes que te siento y sigues en cada parte de mí.
-Viejo mío, sé que siempre estarás conmigo y que allá en el cielo nos encontraremos pues tú nos recibirás.
-Siempre me enseñaste a sembrar amor y a nunca decaer ante las situaciones complicadas, sino mas bien a dar lo mejor de mí con mucho fervor.
-Viejo mío, quiero seguir tus pasos y cuando me acerque al espejo sentir que soy tu reflejo.
Y para ello me esforzaré.
-Viejo mío, sé que estas palabras no bastan para explicarte que eres en mi vida lo más importante pues me guiaste en cada paso que di.
-Ya no estás físicamente, pero siempre viajas conmigo y tu amor plasmado en mí, hará que obre cada día pensando en ti.
-Viejo mío, gracias por enseñarme a ser hombre y amigo, por generar en mí hábitos positivos y porque sigues caminando conmigo hasta que nos volvamos a encontrar.
TE AMO PADRE, SANTIAGO GRAU LEÓN.